·Incendias mi bosque, y lo dejas arder·
Cuando pienso en perderte siento angustia,
y alivio.
Hay días en los que para mí no eres el mejor,
hay días en que te asemejas a lo peor,
Me emboto de tus vacíos propósitos.
Me ahogo en tus promesas inconclusas.
Me arrojo de lleno al mundo que creas,
me matas con las falsas ilusiones.
Dices que ya tendremos tiempo,
el tiempo nuestro era ahora.
Por tanto esperar,
por tanto prometer,
por tanto jurar,
el tiempo se esfumó.
Y quizás,
te toque perder.
No ves mi dolor,
porque no es tuyo.
Tu palabra para mí ya no es nada.
Perdió todo el valor...gracias a ti.
Y aún después de eso,
pides que te comprenda.
Me exiges que sea feliz después de una mala noticia.
El amor no recrimina,
ni exige.
Quizás necesite perder tu amor para dedicarme de lleno a comprenderme.
Aunque sepa bien lo que necesito.
Necesito un amor que no me arda,
necesito un amor comprensivo,
necesito un amor que esté.
Cuando pienso en perderte siento angustia por mi egoísmo,
porque no quiero que veas otros amaneceres si no son conmigo,
y, porque no quiero deshacerme del futuro que nos espera,
porque lo que hemos creado es algo mágico,
por mucho que me hagas olvidarlo cuando te olvidas de tus promesas, o de nuestros planes.
Alivio porque la puerta siempre está abierta para que te vayas o te quedes a tu antojo,
para que cuando te quedes lo hagas porque quieras de verdad.
Alivio porque doy todo de mí,
mi cariño,
mi comprensión,
mis valores,
mi madurez,
mis decisiones,
mi aliento,
mi tiempo,
mi confianza.
Doy todo de mí,
aunque no estés aquí,
y avises una vez más en el último minuto.
Aunque quieras malinterpretar las palabras a tu gusto.
Aunque todo gire entorno a tu necesidad y no a la mía.
Piensa un poco en tu egoísmo, en tu incomprensión.
Y, disfruta del silencio que, será largo.
·Miss.Tina·