De la noche a la mañana

Estoy cansada ya..de ver como una persona que (supuestamente) está enamorada, cambia de la noche a la mañana..de su boca solo salían cosas malas para mí.

Gracias, por no valorar como aguanto que un día te despiertes de buenas y otro no.
Lo que entiendo perfectamente es que ya no puedo más..me duele el alma.

¿Qué no te entiendo?..si no te entendiera no estaría aguantando todo lo que he aguantado.
¿Qué me gusta pelear? genial..te diré lo que me gusta, me gusta dejar las cosas claras.
Y lo que me gustaría es que dejes de ponerte a la defensiva porque algo te vaya mal..no tengo necesidad de atacarte, estoy cansada, no me quedan fuerzas ya.

Tenemos que aprender a no dejarnos llevar tan deprisa, y que si una cosa de mil, no nos sale tan bien como queríamos...pensar que estamos bien en los ámbitos ajenos, los otros que salen sin nada a cambio..la amistad, la familia, el amor...

No debemos de caer tan pronto, demos un poco de guerra más.

Estoy segura..que un día le hablarás a alguien de mí, de lo que fuimos...de como me gustaba pelear, y manipularte..pero ¿sabes qué?..Lo que tú digas.

Creo que de todo se aprende, y que todo tiene un lado positivo, solo hay que rebuscar hasta encontrarlo..al fin y al cabo, si se esconde es porque quiere ser encontrado.

La próxima palabra que salga de tu boca... y que solo me haga daño..te prometo que será la última que me digas...no te dará tiempo de más.
 Porque ya no estaré en tu vida.

¿Porqué las cosas se complican tanto? Si existen dos personas que se aman, que permanezcan juntos, que aprendan juntos, que se amen.
Sin complicaciones.

                                                                                                                 ThB.

El futuro

Y sé muy bien que no estarás.
No estarás en la calle
en el murmullo que brota de la noche
de los postes de alumbrado,
ni en el gesto de elegir el menú,
ni en los libros prestados,
ni en el hasta mañana.
No estarás en mis sueños,
en el destino original de mis palabras,
ni en una cifra telefónica estarás,
o en el color de un par de guantes
o una blusa.
Me enojaré
amor mío
sin que sea por ti,
y compraré bombones
pero no para ti,
me pararé en la esquina
a la que no vendrás
y diré las cosas que sé decir
y comeré las cosas que sé comer
y soñaré los sueños que se sueñan.
Y sé muy bien que no estarás
ni aquí dentro de la cárcel donde te retengo,
ni allí afuera
en ese río de calles y de puentes.
No estarás para nada,
no serás mi recuerdo
y cuando piense en ti
pensaré un pensamiento
que oscuramente trata de acordarse de ti.

                                                                    Julio Cortázar.