·Completas los huecos de mi realidad a medias·
De repente me siento bloqueada,
dividida en dos partes.
Una parte me dice que esto es puro juego,
y otra me invita a fantasear contigo.
Necesidad de verte,
buscarte mientras bailo en el pensamiento de estar contigo.
Un día,
elijo seguir adelante,
cerrando el paso a una despedida.
Me siento absurda,
basta ya de jugar con mis emociones,
de remover todo,
de fijarte en mis detalles,
entre la multitud.
Basta ya de recordarme cada cosa de mí,
yo que me acostumbré a repetir todo porque el entorno olvida.
Y tú me persigues, recordándome que recuerdas.
Estás detrás de cada cosa que hago,
por ello, debo alejarme de esto,
pensando en frío sé de sobra que soy de temporada para ti,
vale cualquier persona para tu juego,
y esto definitivamente no es lo que quiero en mi vida.
Antes jugaba yo, pero ahora tengo inquietud por conquistarnos,
conquistar algo que no existe.
No sé que pretendes, si estás aburrido, asustado,
esperaré un tiempo,
susurro o grito, pero sabrás sin dobleces lo que siento por ti.
Me siento torpe, hago cosas al revés,
intento no caer, en mirarte mientras conduces,
mientras ríes.
El problema que me consume es que realmente fluimos.
Parece que todos lo veían, menos yo,
mirar como me miras,
puñetera tortura,
tortura que elijo con los ojos cerrados,
robarle a la noche minutos,
sin darnos cuenta.
Que duren cien años más esos momentos,
cero acostumbrada a eso,
y no mirar a cuanto vas, porque vas a cien.
Fuego, luces y poca broma.
Contigo estoy fuera de control,
cedo a tu compás continuamente.
Aprendes cada cosa de mí,
te ajustas,
y eres imprescindible ahora.
Es una conspiración entre tus ganas y las mías.
Resulta que alteras todo, y domesticas mis tristezas,
y yo te respondo con regalos como mi tiempo, algo que no espero que sea recíproco,
una explosión eso eres.
La apuesta la hice yo.
Tú nunca te alejaste de nada.
Y ya no hay nada más que hacer, más que hielo.
Enfriar la situación,
enfriar los planes, y poner distancia,
antes de que nos explote.
No voy a mentir, y sé que no estarás en mi vida, en unos años vernos será casi imposible.
Directos al exilio, ahora te viene bien estar, pero no creo que esperes aquí sentado.
Cuestión de prioridad.
Tengo ganas de preguntarte el por qué,
porqué haces daño, porqué juegas así,
porqué mi corazón late rápido al oír tu nombre, al pensar en despedirme de ti, aunque vaya a verte al día siguiente.
·Miss.Tina·
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios:)