Por el camino

 "Pregúntate.

Date cuenta.

Hoy, nadie ha pensado en ti, nadie te ha preguntado si hoy te apetece reír, llorar, hablar, o simplemente callar y mirarle a los ojos las horas que hagan falta antes de que duerma.

 Nadie ha sabido percicbir tus ganas de comerte el mundo, ni han sabido tampoco aprender a notar que los dolores ajenos no son siempre físicos. Nadie. "

Te das cuenta que ya no valen las cartas de amor, los juramentos en vano.
Y los "te quiero" en silencio.

Te das cuenta que los sentimientos surgen, que esos "te quiero" salen disparados sin ningún tipo de permiso. Influenciados por algo tan absurdo como el amor.

Que idiotas nos sentimos, que atontados, que cómodos, que nos hace querer tener buenas intenciones en todo momento.

Nos hace contar hasta mil antes de decir la siguiente estupidez.
Nos hace necesitar.

De repente las contradicciones se vuelven apetecibles.

Quieres hasta cuando te destrozan.
Quieres con indecisión.
Quieres con las alas rotas, sin explicación.
Quieres como tantas otras cosas que no tienen solución.

Te das cuenta que aunque no lo valoren, eso surge, sale sin control alguno.
Amas incluso sin apreciarlo, sin verlo.

Pero está ahí.

Y que lo escrito, ahí está, aunque no haya sido valorado.
Que lo que hayas sentido, aquí está, sin quererlo, no de la misma forma, y desde luego no a plena luz.
Ya no se esconden de la sinceridad.