·Lo peor que hacen los malos es obligarnos a dudar de los buenos·
Ceder,
queriendo,
hoy por ti, mañana por mí.
Que sencillo y a la vez tan complicado.
Nuestro orgullo está aquí,
nos empuja hacia todo lo contrario.
Pero parece que deben recetarnos un poco de respeto
para poder valorarlo,
respeto porque al querer no puedes evitar pensar en ceder.
Llega un punto en el que ni lo piensas.
Anteponer el respeto antes que el orgullo.
Antes de que sea tarde y el orgullo lo destruya todo.
Antes de que lo grave sea algo tan simple como no ceder en momentos puntuales,
no pensar antes en lo que esa persona pueda querer.
Que fallos más tontos.
Aceptar que de vez en cuando nos debemos atribuir los cambios.
Que eso tan simple no sea lo que nos separe, y termine por alejarnos.
No contestes al orgullo, vete.
·Miss.Tina·
Caminé sobre el fuego a tu lado.
Me entregué, como un ciego de la mano.
Fuiste tú como hielo en mis pies ya cansados.
No hay nada que esconder.
Quédate solo un minuto entre los dos, será eterno
Mírame, no digas nada, abrázame en silencio
Si quieres huir después, yo no te seguiré.
Quédate, aunque no hay nada entre tú y yo.
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